Title: Hacer click para cntinuar ?
1El regreso del Hijo Pródigo Rembrandt
La Boutique Del PowerPoint
Hacer click para cntinuar ?
2Se trata de un tema religioso extraído de las
Sagradas Escrituras. (Lucas 15 11-32). Este
lienzo es la representación pictórica de la
parábola evangélica del hijo pródigo,
en la cual el menor de dos hermanos, después de
pedir a su padre la parte de la herencia que le
correspondía y de haberla dilapidado llevando una
vida disoluta lejos del hogar, se presenta ante
él arrepentido y recibe su amoroso perdón.
La Boutique Del PowerPoint
3Rembrandt ha pintado siempre sus escenas como auténticos acontecimientos, dotándolas de la tensión exigida y despojándolas de detalles superfluos. Es el caso del final de la Parábola del Hijo Pródigo, eligiendo el momento en que el hijo regresa a casa y recibe la misericordia del padre.
4El abrazo de ambos es el momento culminante del suceso como bien nos muestra el maestro.
Las demás figuras que ocupan el lienzo, observan el feliz desenlace.
La obra corresponde a las características de Rembrandt, (de quien se dice que se autorretrató en el personaje del hijo que regresa)
Importancia de la luz dorada que crea efectos atmosféricos Profundo contraste entre zonas iluminadas y ensombrecidas siguiendo a Caravaggio Empleo de colores oscuros animados por el rojo expresiones de los personajes Una pincelada rápida, casi abocetada tomando a Tiziano como referencia.
5El padre un anciano medio ciego con barba y
bigote, vestido con una ropa bordada en oro y una
túnica de rojo intenso. Rembrandt, después de
pasar por una serie de experiencias cargadas de
dramatismo y dolor, muestra una especial
fascinación por la gente ciega. A medida que la
luz en su obra va haciéndose más intimista,
comienza a pintar ciegos presentándolos como los
que realmente ven.
6Bajo la forma de un viejo patriarca judío, emerge también un Dios maternal que recibe a su hijo en casa.
El anciano de Rembrandt se inclina sobre su hijo
recién llegado y tocándole los hombros con las
manos, se puede apreciar, no sólo al padre que
estrecha al hijo en sus brazos, sino a la madre
que acaricia a su niño, le envuelve con el calor
de su cuerpo, y le aprieta contra el vientre del
que salió.
7El núcleo del cuadro de Rembrandt son las manos
que se posan sobre los hombros del hijo que
regresa. En ellas se materializa la mirada
interior del padre. En ellas se concentra toda
la luz.
8La mano izquierda, sobre el hombro del hijo, es fuerte y musculosa. Los dedos están separados y cubren gran parte del hombro y de la espalda del hijo. Se nota cierta presión, sobre todo en el pulgar. Esta mano no sólo toca, sino que también sostiene con su fuerza. Es una mano de gran firmeza.
La mano derecha es fina, y suave. Los dedos están
cerrados y son muy elegantes. Se apoyan
tiernamente sobre el hombro del hijo menor.
Quiere acariciar, mimar, consolar y confortar.
Es la mano de una madre. Algunos estudiosos
sugieren que la mano izquierda masculina es la
mano de Rembrandt, y que la derecha es muy
similar a la mano derecha de La novia Judía,
pintada en el mismo período.
9A ellas se dirigen las miradas de los curiosos
que contemplan la escena principal del
cuadro. En ellas la misericordia se hace carne,
en ellas se une el perdón, la reconciliación, la
sanación, y a través de ellas encuentran un
descanso no sólo el hijo cansado, sino también el
anciano padre.
10El joven, sostenido y bendecido por el padre,
dejó su casa lleno de orgullo y dinero,
determinado a vivir su propia vida lejos de su
padre. Ahora vuelve sin dinero, sin salud, sin
honor, sin dignidad, sin reputación, sin nada. Lo
ha despilfarrado todo. La pérdida de todo fue lo
que lo llevó al fondo de su identidad. Retrospect
ivamente parece que el pródigo tuvo que perderlo
todo para entrar en lo profundo de su ser. No
lleva túnica. La ropa amarilla que le pone
Rembrandt es ropa interior que apenas le cubre el
cuerpo cansado y sin fuerzas.
11Rembrandt deja muy pocas dudas acerca de su
estado. Tiene la cabeza afeitada. Ya no queda
nada del largo cabello rizado con el que
Rembrandt se había retratado orgulloso y
desafiante en el burdel. A primera vista se
podría deducir que es la cabeza de alguien que ha
estado prisionero o vivido en un campo de
concentración. Pero si nos fijamos bien, su
cabeza es como la de un bebé y su cara es como la
de un feto. Acaso no estaba Rembrandt retratando
no sólo el regreso del hijo, sino el regreso al
vientre de Dios, que es Madre y Padre?
12Las plantas de los pies muestran la historia de
un viaje humillante. Tiene una cicatriz en el
pie izquierdo que está fuera de la sandalia. El
pie derecho, cubierto en parte por una sandalia
rota, también habla de miseria y sufrimiento.
13El testigo principal, mirando cómo el padre
abraza a su hijo, está como apartado. Mira al
padre sin alegría. No se acerca, no sonríe, no
expresa la bienvenida. Simplemente está allí, de
pie, a un lado de la plataforma, sin deseo
aparente ni intención alguna de participar en el
recibimiento del padre.
14Padre e hijo mayor, según los
pintó Rembrandt, tienen mucho en común Los dos
tienen barba y bigote y lucen largas túnicas
rojas sobre sus hombros. La luz dibujada
sobre el hijo mayor, conecta muy directamente con
el rostro del padre. Sin embargo, lo que
expresan es completamente diferente
15El padre se inclina sobre su hijo recién llegado.
El hijo mayor se queda de pie, rígido, postura
que se acentúa por el largo bastón que sujeta con
las manos y que llega hasta el suelo. El manto
del padre es ancho y acogedor, el del hijo es
pesado. Las manos del padre están extendidas y
tocan al recién llegado en un gesto de bendición.
Las del hijo están cogidas ala altura de su
vientre. Hay luz en ambos rostros, pero la luz
de la cara del padre recorre todo su cuerpo,
especialmente sus manos y envuelven al hijo menor
en un halo de cálida luminosidad. La luz en el
rostro del hijo mayor es fría y estrecha. Su
figura permanece en la oscuridad, sus manos en la
sombra.
16F I N
Para más información sobre el cuadro, visitar
http//www.ejoven.net/dentro/recursos/barroco/ind
ex.htm
Reedición de esta presentación por cortesía de
Carlos Rangel Santiago de Querétaro, Mex. Julio
2007
17(No Transcript)