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ILUSTRACIÒN Y MODERNIDAD El proyecto de
modernidad formulado en el siglo XVIII por los
filósofos de la Ilustración consistió en sus
esfuerzos para desarrollar una ciencia objetiva,
una moralidad y leyes universales y un arte
autónomo acorde con su lógica interna.

J. Habermas, 1981
SUJETO PENSANTE (cogito ergo sum) territorio
único donde habita el dios de lo significados
del mundo LA RAZÓN. dueño de las identidades y
de las clasificatorias RAZÓN ordenadora que
refunda valores, saberes y certezas establece
paradigmas para la acción y la reflexión, para la
crítica y la utopía. El Lenguaje de la
RAZÓN auténtico asaltante de los antiguos
poderes fabricante incesante de certezas y de
sentido.
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MODERNIDAD Y POSTMODERNIDAD AGOTAMIENTO DEL
PROYECTO DE LA MODERNIDAD DESENCANTO ANTE LA
PÉRDIDA DE LEGITIMIDAD DE LOS GRANDES RELATOS
- CRISIS DE LAS REPRESENTACIONES - CRISIS DEL
SUJETOLa crisis está en la génesis de todo lo
moderno formará parte del creciente y
generalizado espíritu de época La
discursividad moderna nace de ese punto máximo de
la desprotección espiritual, de ese vacío que
queda con el retiro de la historia de dios de
esa conciencia de lo que se extingue. La
dramaticidad de lo irresuelto que hace de la
modernidad lenguaje de lo real, pero también
abismo entre el lenguaje y lo real conciencia y
prepotencia del lenguaje frente a las fronteras
y precipicios de las realidades de la historia.
La palabra ilumina y esconde. Da cuenta de la
metamorfosis y aparece como conciencia del nuevo
hogar del hombre, a la medida de sus obsesiones
zona no de la verdad, sino del desvarío. El
sujeto enunciador del mundo surgirá como
subjetividad que enfrenta a ese mundo, que lo
imagina desde la desmesura, para despertar
patéticamente entre sus pliegues engañosos el
sujeto es el héroe solitario de la modernidad.
Habitaríamos una época donde la sensibilidad y la
creatividad del hombre enfatizan la incertidumbre
frente a su propia figura y frente al
mundo. WALTER BENJAMÍN LO MODERNO ES UN
TIEMPO ARCAICO PRIMITIVO DONDE SOBREVIVE LO
MESIÁNICO INCUMPLIDO Y LA ESPERANZA SIEMPRE
LATENTE DE QUE SE CUMPLA GILLES DELEUZE EL MUNDO
MODERNO ES EL MUNDO DE LOS SIMULACROS. LO REAL
ES UNA CONSTRUCCIÓN, UN ENREJADO CREADO POR LA
CULTURA QUE IMPONE TODAS SUS FORMAS DE
RECONOCIMIENTO OCTAVIO PAZ EL PRINCIPIO QUE
FUNDA NUESTRO TIEMPO NO ES LA VERDAD ETERNA,
SINO LA VERDAD DEL CAMBIO THEODOR ADORNO LO
DISONANTE SE HA CONVERTIDO EN UNA CIERTA
CONSTANTE DE LO MODERNO
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LA MODERNIDAD lugar de la revolución donde el
lenguaje se muestra como nuevo acontecimiento
horizonte para la realización de la
historia mito de progreso y felicidad desde la
racionalidad del sujeto el mundo acontece con
sentido Mundo de representaciones y
constelaciones de discursos hegemónicos
victoriosos discursividad
moderna en sus elementos esenciales la
recuperación del hombre para una teodicea
terrenal (ansias de aplicación, de utilidad y
hallazgo de verdades terrenales) y la calidad
emancipatoria de la razón KANT LO MODERNO ES
LA LIBERACIÓN DEL HOMBRE DE SU CULPABLE
INCAPACIDAD la incapacidad de servirse de su
entendimiento sin la dirección de otro
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ILUMINISMO ALEMÁN filosofía de la historia
crítica y refundación de la historia estética
crítica y despertar heroico (no sólo racional)
del sujeto del nuevo tiempo primer desgarramiento
de la conciencia moderna
GOETHE - SCHILLER STURM UND DRANG TEMPESTAD Y
EMPUJE apertura de nuevas dimensiones
problemáticas del concepto de EXPERIENCIA cambios
en la comprensión dominante del YO, LA
NATURALEZA, LA HISTORIA Sólo al POETA le
conviene el nombre de CREADOR porque a través de
su arte, no sólo comunica cuerpos visibles a las
cosas invisibles, sino que también las cosas que
son para los sentidos, por así decirlo, las crea,
esto es, las lleva del estado de la posibilidad
al estado de la realidad
Un POETA es un hombre que habla a otros hombres,
un hombre dotado de una aguda sensibilidad, de
un mayor entusiasmo y una mayor ternura, que
posee un mayor conocimiento de la naturaleza
humana y un alma más comprensiva de la que se
supone poseen los mortales comunes un hombre
satisfecho de sus propias pasiones y deseos, que
se regocija, más que otros hombres, del espíritu
de vida que vive en él

William
Wordsworth