Title: MSc. Odalys Garc
1HIPERTENSIÓN ARTERIAL EN ADULTOS
MAYORES Terapéutica Antihipertensiva
- MSc. Odalys García Arnao
- ogarnao_at_infomed.sld.cu
- CITED
2Las enfermedades cardiovasculares son la
principal causa de muerte en adultos mayores de
60 años, por lo que esta es una población
altamente consumidora de medicación con efectos
sobre este sistema. Existe actualmente un gran
arsenal para el tratamiento de la HTA, pero cada
grupo farmacológico presenta características
propias que difieren entre si, por lo que cada
caso debe ser valorado individualmente para poder
realizar una selección correcta.
3Diuréticos tiazídicos (Clortalidona,
Hidroclorotiacida)
Droga de primera línea, preferida en la mayoría
de los ancianos hipertensos, usado en una dosis
de 6.25 a 25mg/día. Puede combinarse con un
diurético ahorrador de potasio como la
espironolactona, si aparecen calambres o la
concentración de potasio está disminuida. Deben
usarse con precaución pues el bloqueo de la
función baroreceptora puede facilitar la
hipotensión ortostática y predisponer a las
caídas. Cabe destacar el aumento indeseable del
ácido úrico, que contraindica su uso en
pacientes gotosos.
4Diuréticos de ASA (Furosemida)
- Deben ser reservados solo para aquellos pacientes
que exhiban síntomas y signos de insuficiencia
cardiaca o renal. - Tolerancia de diuréticos (todos).
- En dosis relativamente bajas estos preparados se
toleran bien por los pacientes de edad avanzada.
Sin embargo, los preparados con potente efecto
diurético y corta duración de acción (diuréticos
de ASA) pueden ser desfavorables en pacientes con
incontinencia urinaria.
5Inhibidores de la enzima convertidora de
angiotensina (IECAs).
Efectivos para el tratamiento de la HTA e
insuficiencia cardiaca (IC) en ancianos, a pesar
de que éstos, tienen baja actividad renina
plasmática. Son útiles en la nefropatía
hipertensiva y diabética y están especialmente
indicados en hipertensos con IC ó diabetes.
Puede haber riesgo de caída tensional grave al
estimular el sistema renina-angiotensina, por lo
que se debe iniciar siempre con dosis bajas. Si
se están usando diuréticos y se precisa
adicionar IECAs, se deben suspender los primeros
durante el inicio del tratamiento combinado.
Indicar con precaución en caso de deterioro
renal.
6Bloqueantes de canales de calcio
Los dihidropiridínicos (nifedipino, amlodipino,
etc.) de acción prolongada, han demostrado su
eficacia en diversas circunstancias. Son útiles y
seguros en los ancianos, siendo sus efectos
ligeramente superiores que en los pacientes
jóvenes. El efecto antiarterioscleroso demostrado
en estudios de regresión, los haría
particularmente indicados en este grupo. Los
bloqueantes de canales de calcio no
dihidropiridínicos, tales como el diltiazem y
verapamilo, parecen tener una particular ventaja
en casos de disfunción diastólica.
7Beta Bloqueantes
La disminución de la sensibilidad de los beta
receptores en los adultos mayores, unido a la
prevalencia de IC, síndrome del seno carotídeo,
enfermedad arterial periférica, intolerancia a la
glucosa, EPOC, etc., convierte a los no
cardioselectivos en fármacos de pobre elección
en ocasiones. Las nuevas generaciones de beta
bloqueantes, (labetalol, carvedilol y nebivolol),
con propiedades vasodilatadoras y aumento de
producción de óxido nítrico, tornan posible su
utilización en esta población por su perfil
hemodinámico diferente, aunque mantienen riesgo
de influencia en el metabolismo de la glucosa. En
las mujeres de edad avanzada, pueden ser menos
efectivos y podrían ser desventajosos respecto a
los bloqueadores de canales de calcio o los
IECAs.
8Drogas antiadrenérgicas periféricas
El doxazosin, prazosin y trimazosin están
indicados primariamente en casos de hipertrofia
prostática. El más moderno, doxazosin, está
desprovisto de hipotensión ortostática y efecto
de primera dosis. La administración nocturna de
la misma y la curva de su efecto atenuarían el
ascenso tensional matutino .
9Bloqueantes de receptores de angiotensina (ARA)
Sólo deberían ser prescriptos en pacientes
intolerantes a los IECAs, los que habitualmente
presentan tos debido a los mismos.
10RECOMENDACIONES GENERALES EN ENFERMEDADES
CONCOMITANTES
- Un diurético debe ser utilizado para fallo
cardíaco o edema. - Un betabloqueador debe ser utilizado en la
cardiopatía coronaria, en taquiarritmias,
cefaleas migrañosas y pueden emplearse los
cardioselectivos como el carvedilol, en la
insuficiencia cardiaca congestiva. - Un IECA debe ser utilizado en el fallo cardíaco
por disfunción sistólica, una nefropatía crónica
de ligera a moderada, en particular la nefropatía
diabética o una enfermedad vascular periférica.
11RECOMENDACIONES GENERALES EN ENFERMEDADES
CONCOMITANTES
- Un bloqueador de canales de calcio debe ser
utilizado en el fallo cardíaco debido a
disfunción diastólica, enfermedad vascular
periférica o el verapamilo para las
taquiarritmias. - Un bloqueador-alfa debe ser utilizado para el
prostatismo. - El riesgo de hipotensión ortostática y caída
está presente con cualquier fármaco
antihipertensivo empleado.
12Principios en la terapia antihipertensiva en
adultos mayores
- Las dosis iniciales de las drogas deben ser
bajas (50 de las utilizadas en la población
general), para disminuir al máximo el riesgo de
efectos secundarios. - El incremento de las dosis y la reducción de la
TA debe ser gradual, para disminuir el riesgo de
síntomas isquémicos. - Utilizar monodosis siempre que sea posible, con
formulaciones de efecto prolongado.
13Principios en la terapia antihipertensiva en
adultos mayores
- Vigilar atentamente los efectos adversos,
especialmente la hipotensión postural. - Tener presente las interacciones farmacológicas
con otros medicamentos. -