Title: Trabajo de C
1Trabajo de César Vallejo
2Biografía
- César Abraham Vallejo Mendoza nació en Santiago
de Chuco, un pueblo andino del Perú. César fue el
menor de once hermanos. Sus padres querían
dedicarlo al sacerdocio, lo que él en su primera
infancia aceptó de muy buena gana de ahí que
existan tantas referencias bíblicas y litúrgicas
en sus primeros poemas. Sus estudios primarios
los realiza en el mismo Santiago de Chuco, pero
desde abril de 1905 hasta 1909 estudia la
secundaria en el colegio San Nicolás de
Huamachuco. En 1910 se matricula en la Facultad
de Letras de la Universidad Nacional de Trujillo
pero se retira por carencias económicas. Trabaja
en la hacienda azucarera Roma, en el valle de
Chicama. - Retorna a Trujillo a retomar sus estudios
universitarios. Trabaja como profesor a fin de
costearse sus estudios. en 1919 es profesor en el
Colegio Guadalupe. Ese año ven la luz los poemas
de Los heraldos negros, que muestran huellas del
modernismo en su estructura. Se vendieron
relativamente pocos ejemplares, pero el libro fue
bien recibido por la crítica. Su madre murió en
1920 y al volver a Santiago de Chuco es
encarcelado injustamente durante 105 días,
acusado de haber participado en el incendio y
saqueo de una casa. En la cárcel escribe la
mayoría de los poemas de Trilce. En 1921 sale en
libertad condicional y se dirige nuevamente a
Lima, pues su cuento Más allá de la vida y de la
muerte es premiado . - En 1922 Antenor Orrego, líder del Grupo Norte,
publica los poemas que Vallejo escribió durante
su reclusión con el título Trilce. - No menos importante es su breve libro España,
aparta de mí este cáliz, obra póstuma de César
Vallejo, que sin duda compendia los versos más
intensos y hondos que escritor alguno llevó a
cabo sobre la Guerra Civil Española
(1936-1939).Finalmente murió en París el 15 de
abril de 1938).
3Al borde de un sepulcro florecido
-
Al borde de un sepulcro florecido
transcurren
dos marías llorando,
llorando a mares. -
El ñandú desplumado del recuerdo
alarga su
postrera pluma,
y con ella la mano negativa de
Pedro
graba en un domingo de ramos
resonancias de exequias y
de piedras. -
-
Del borde de un sepulcro removido
se alejan dos
marías cantando.
4Yo nací un día
- Yo nací un día que Dios estuvo enfermo.Todos
saben que vivo, que soy malo y no sabendel
diciembre de ese enero.Pues yo nací un día que
Dios estuvo enfermo.Hay un vacíoen mi aire
metafísicoque nadie ha de palparel claustro de
un silencioque habló a flor de fuego.Yo nací un
díaque Dios estuvo enfermo.Hermano, escucha,
escucha...Bueno. Y que no me vayasin llevar
diciembres,sin dejar eneros.Pues yo nací un
díaque Dios estuvo enfermo.Todos saben que
vivo,que mastico... Y no sabenpor qué en mi
verso chirrían,oscuro sinsabor de
féretro,luyidos vientosdesenroscados de la
Esfingepreguntona del Desierto. Todos saben...
Y no sabenque la luz es tísica,y la Sombra
gorda...Y no saben que el Misterio
sintetiza...que él es la jorobamusical y triste
que a distancia denunciael paso meridiano de las
lindes a las Lindes.Yo nací un día que Dios
estuvo enfermo,grave.
5Su pueblo
- Este es Santiago de Chuco, el pueblo donde nació
César Vallejo, podemos ver también el Colegio
Guadalupe, donde el autor estuvo dando clases
durante varios años.
6Poemas
Me moriré en París con aguacero,un día del cual
tengo ya el recuerdo.Me moriré en París -y no me
corro-talvez un jueves, como es hoy de
otoño.Jueves será, porque hoy, jueves, que
prosoestos versos, los húmeros me he puestoa la
mala y,jamas como hoy, me he vuelto,con todo mi
camino, a verme solo.César Vallejo ha muerto,
le pegabantodos sin que él les haga nadale
daban duro con un palo y durotambién con una
soga son testigoslos días jueves y los huesos
húmeros,la soledad, la lluvia, los caminos
Hay golpes en la vida, tan fuertes Yo no
sé!Golpes como del odio de Dios como si ante
ellos,la resaca de todo lo sufridose empozara
en el alma Yo no sé!Son pocos pero son Abren
zanjas oscurasen el rostro más fiero y en el
lomo más fuerte. Serán talvez los potros de
bárbaros atilaso los heraldos negros que nos
manda la Muerte.Son las caídas hondas de los
Cristos del alma,de alguna fe adorable que el
Destino blasfema.Esos golpes sangrientos son las
crepitacionesde algún pan que en la puerta del
horno se nos quemaY el hombre Pobre pobre!
Vuelve los ojos, comocuando por sobre el hombro
nos llama una palmadavuelve los ojos locos, y
todo lo vividose empoza, como charco de culpa,
en la mirada.Hay golpes en la vida, tan
fuertes Yo no sé!
- Yo nací un día que Dios estuvo enfermo.Todos
saben que vivo, que soy malo y no sabendel
diciembre de ese enero.Pues yo nací un día que
Dios estuvo enfermo.Hay un vacíoen mi aire
metafísicoque nadie ha de palparel claustro de
un silencioque habló a flor de fuego.Yo nací un
díaque Dios estuvo enfermo.Hermano, escucha,
escucha...Bueno. Y que no me vayasin llevar
diciembres,sin dejar eneros.Pues yo nací un
díaque Dios estuvo enfermo.Todos saben que
vivo,que mastico... Y no sabenpor qué en mi
verso chirrían,oscuro sinsabor de
féretro,luyidos vientosdesenroscados de la
Esfingepreguntona del Desierto. Todos saben...
Y no sabenque la luz es tísica,y la Sombra
gorda...Y no saben que el Misterio
sintetiza...que él es la jorobamusical y triste
que a distancia denunciael paso meridiano de las
lindes a las Lindes.Yo nací un día que Dios
estuvo enfermo,grave.
Al fin de la batalla,y muerto el combatiente,
vino hacia él un hombrey le dijo No mueras, te
amo tanto!Pero el cadáver ay! siguió
muriendo.Se le acercaron dos y
repitiéronleNo nos dejes! Valor! Vuelve a la
vida! Pero el cadáver ay! siguió
muriendo.Acudieron a él veinte, cien, mil,
quinientos mil,clamando Tanto amor, y no poder
nada contra la muerte! Pero el cadáver ay!
siguió muriendo.Le rodearon millones de
individuos,con un ruego común Quédate
hermano! Pero el cadáver ay! siguió
muriendo.Entonces, todos los hombres de la
tierrale rodearon les vió el cadáver triste,
emocionado incorporóse lentamente,abrazó al
primer hombre echóse a andar