Title: SACERDOTE DE BARRO, BENDICI
1Sacerdote de barro, bendición para el pueblo.
2Peregrino del mundo es tu vida de siervo, que
penetra la aurora en su místico velo, que
escudriña los soles lacerantes y bellos y
descifra la sombra a la luz del misterio. Al
pisar las infancias recibiste el destello de
cruzar horizontes que estremecen de miedo, de
subir a las cumbres que reciben del cielo la
pureza de luna y el cantar del lucero.
3Peregrino es el siervo que ha dejado su techo y
repite los pasos del Divino Viajero. En las
duras jornadas has probado el flagelo que se
hunde en tu barro como llamas de fuego y se
empaña la vista... y se ofusca el
recuerdo... Cuando así solitario has cruzado
el desierto, sin la miel de las flores y el
cantar del jilguero, peregrino has
quedado injertado en el Siervo.
4Has llegado al inicio del enorme sendero, donde
el canto y la espina mezclarán tu ser nuevo de
tabores amados y tristezas de huerto. Hoy tu
puño de barro, frágil, pobre y sediento se ha
vestido de gala con ropajes de invierno. Sacer
docio de Cristo florecido en el
cielo! Sacerdocio de barro bendición para el
pueblo!
5Que transido de luz del Espíritu Eterno, des
color y belleza a lo grande y pequeño. Pon en
alto tu antorcha de servicio fraterno, sembrador
de palabra con amor misionero para guiar al
hermano sigue siempre el sendero que conduce a la
vida, con manjares de cielo. Cuando bogue tu
barca por los mares sin puerto, cuando veas que
tu huella se ha esfumado en el viento,
6sentirás que la fuerza de tu eterno ser nuevo, a
los seres de polvo, les devuelve el
aliento sentirás que aunque seas un perenne
romero, llevarás en tu arcilla las victorias del
Verbo. Pbro. Rafael González Reynoso Roma,
It. Enero de 1978.
Música de fondo La última cena. Mario Ramos
Palomino.