Title: el poeta.
1Gustavo Adolfo Bécquer
2Breve cronología de su vida
- 1836 Nace en Sevilla el 17 de febrero. Hijo de
doña hijo Joaquina Bastida y del pintor José
Domínguez Bécquer. - 1846 comenzó la carrera de náutica, en San Telmo,
en Sevilla. Cuando el colegio cerro sus puertas.,
se fue a vivir con Manuela Monahay y bajo su
cuidado estudio pintura y latín. - 1854 Se traslado a Madrid, con la intención de
hacer carrera literaria. - 1858 Estuvo nueve meses en cama a causa de una
enfermedad, probablemente tuberculosis. - 1861 Contrajo matrimonio con Casta Esteban, hija
de un medico, con la que tuvo tres hijos.
3Breve cronología de su vida
- 1861 a 1865 Compuso la mayor parte de sus
leyendas, escribió crónicas periodísticas y
redacto las Cartas literarias a una mujer. - 1866 Obtuvo empleo de sensor oficial de
novelas, lo cual de permitió dejar sus crónicas
periodísticas y concentrarse en sus Leyendas y
sus Rimas. - 1868 - Su manuscrito de Rimas, escrito en 1867,
se perdió durante la revolución. Y reescribió
casi de memoria. - 1870 Fallece en Madrid un 22 de diciembre.
4Obras de Gustavo Adolfo Bécquer
- Rimas, escrito en 1867.
- Historias de los templos de España, Madrid, 1857,
publica solo el tomo I. - Cartas literarias a una mujer, 1860-1861,
publicadas en El Contemporáneo. - Cartas desde mi celda, Madrid, 1864, son nueve,
publicadas en El Contemporáneo, y reunidas
posteriormente en la edición de Fortanet con el
titulo Desde mi celda. - Libro de los gorriones, 1868, manuscrito.
- Obras completas, Madrid, Fortanet, 1871, dos
volúmenes.
5Rimas
Rima XIII Tu pupila es azul y, cuando ríes, su
claridad süave me recuerda el trémulo fulgor de
la mañana que en el mar se refleja. Tu pupila
es azul y, cuando lloras, las transparentes
lágrimas en ella se me figuran gotas de
rocío sobre una vïoleta. Tu pupila es azul, y
si en su fondo como un punto de luz radia una
idea, me parece en el cielo de la tarde una
perdida estrella. Rima XXX Asomaba a sus ojos
una lágrima y a mi labio una frase de
perdón habló el orgullo y se enjugó su
llanto, y la frase en mis labios expiró. Yo voy
por un camino ella, por otro pero, al pensar
en nuestro mutuo amor, yo digo aún ?Por qué
callé aquel día? Y ella dirá ?Por qué no lloré
yo?