Title: La sanidad divina
1La sanidad divina
24 razones para creer que Dios sana hoy
31ª - Se encuentra en la Biblia. Jesucristo
revelado en las Escrituras como sanador es el
mismo ayer, y hoy, y por los siglos, Hebreos
13.8. 2ª - La sanidad se encuentra dentro de la
obra expiatoria de Cristo. La salvación incluye
la sanidad de nuestra vida en todos sus
aspectos. 3ª - El ser humano es espíritu, alma,
y cuerpo, por lo tanto la salvación deberá tener
aplicación al ser humano en cada una de las áreas
que lo forman. 1ª Tesalonicenses 5.23 4ª - La
salvación es en última instancia una restauración
del mundo caído.
4El origen y la naturaleza de la enfermedad
5Dios no quiere el sufrimiento del ser humano, y
así fue en su creación. La Biblia enseña que el
sufrimiento humano es consecuencia de la caída de
Adán, no de la voluntad de Dios. El pecado y la
enfermedad fueron obra del hombre, y lo que hizo
Dios fue llegar al extremo para corregir esta
obra por medio de su plan de redención. La
experiencia presente del universo creado no se
debe a la voluntad de Dios, sino al hecho de que
el cosmos es el mundo apartado de Dios. Los
milagros de sanidades hechos por Jesús hablan del
anhelo por parte de Dios de restaurar físicamente
y no tan sólo espiritualmente a la humanidad
quebrantada.
6La enfermedad en el Antiguo y en el Nuevo
Testamento
7En el pensamiento judío, el sufrimiento físico y
el pecado siempre iban asociados de cierta
manera. Hay muchos pasajes bíblicos que
relacionan el pecado y la enfermedad, y,
consecuentemente, el perdón y la sanidad. Nada
hay sano en mi carne a causa de tu ira ni hay
paz en mis huesos a causa de mi pecado. Salmo
38.3 Fueron afligidos los insensatos a causa del
camino de su rebelión y a causa de sus maldades
Salmo 107.17 En este último texto, la palabra
aflicción significa enfermedad, y demuestra
que este versículo hace resaltar la conexión
entre la enfermedad y el pecado.
8En el Nuevo Testamento vemos que aunque Jesús no
aceptara un dogma sobre una retribución mecánica,
hay numerosas indicaciones de que la enfermedad y
el pecado estaban conectados algunas veces. Juan
9.1-3.
9La relación entre lo demoniaco y la enfermedad.
Hay una gran cantidad de evidencias en las
Escrituras, en especial en los evangelios, que
apuntan la realidad de que algunas enfermedades
son de origen demoniaco. Lucas 13.11-17 La
mujer encorvada Mateo 9.32-34 El hombre mudo
10La sanidad en el Antiguo y en el Nuevo Testamento
11Tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo
presentan a Dios como Sanador. En el Antiguo
Testamento, Dios impuso el que se guardara la ley
como condición para experimentar los beneficios
de la sanidad. El Nuevo Testamento muestra que
los beneficios de la sanidad están abiertos a
todos los que se vuelvan a Dios a través de Jesús
en una fe confiada. En todas las secciones de
las Escrituras judías la imagen de Yahwé como
sanador se halla presente como un aspecto central
de la relación entre Dios y el pueblo del
pacto. Les dijo Si escuchas atentamente la voz
de Jehová, tu Dios, y haces lo recto delante de
sus ojos, das oído a sus mandamientos y guardas
todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las
que envié sobre los egipcios traeré sobre ti,
porque yo soy Jehová, tu sanador. Éxodo 15.26
12 La sanidad como parte de la salvación
13El concepto de que a Dios le interesa el alma, y
no la persona total, es ajeno a las Escrituras.
El evangelio completo para la persona completa es
un tema vital para la predicación y enseñanza de
hoy. La costumbre de rebajar al cuerpo y al
mundo material era algo prominente entre muchos
de los primeros filósofos griegos. Platón
consideraba al cuerpo (gr. soma) como una tumba o
sepultura (gr. sema). Una razón por la que
muchos teólogos de hoy muestran tanta resistencia
a incluir la sanidad divina en la expiación es
esta lamentable herencia de conceptos incorrectos
sobre la naturaleza de los seres humanos. La
Biblia presenta a la naturaleza humana como una
unidad. Es la persona toda, la que es redimida
por Cristo. 1ª Tesalonicenses 5.23
14El correlativo de la doctrina de la
reconciliación es restauración y sanidad. Así,
una persona que haya recibido la salvación y haya
sido internamente santificada, y restaurada
espiritual y emocionalmente por el Espíritu
Santo, no tiene menos necesidad o derecho de
estar físicamente sana. Ireneo, uno de los
primeros padres de la iglesia, creía que la
salvación rescataba al cuerpo, no del cuerpo.
15Los 2 textos claves
16Probablemente dos de los textos más importantes
para entender la relación entre la obra
expiatoria de Jesús y la sanidad sean los
siguientes Ciertamente llevó él nuestras
enfermedades y sufrió nuestros dolores, pero
nosotros lo tuvimos por azotado, como herido y
afligido por Dios! Mas él fue herido por nuestras
rebeliones, molido por nuestros pecados. Por
darnos la paz, cayó sobre él el castigo, y por
sus llagas fuimos nosotros curados. ISAÍAS 53.4,
5 Para que se cumpliera lo dicho por el profeta
Isaías Él mismo tomó nuestras enfermedades y
llevó nuestras dolencias. MATEO 8.17
17shalom
18Antes de la caída en el huerto del Edén había una
situación de paz (hebreo shalom). Es una
experiencia de salud y bienestar desprovista de
sufrimiento, además de tener paz con Dios. La
obra de Cristo en la cruz es la restauración del
shalom. El saludo típico de las epístolas
paulinas es una oración por los creyentes, para
que experimenten la gracia y el shalom que se
encuentra en Cristo. Este shalom por el que
sufrió Cristo no se debe entender como lo
entienden muchos creyentes sola y exclusivamente
la paz psicológica o emocional. El shalom por el
que Cristo sufrió, murió y resucitó es un shalom
para toda la persona cuerpo, alma y espíritu.
19Retos a la doctrina de la sanidad divina
20Retos desde el mundo secular 1º - La negación
rotunda de lo sobrenatural. 2º - Comparar los
milagros del Nuevo testamento con la magia pagana
del primer siglo. Retos procedentes de
cristianos 1º - El del protestantismo liberal.
Muchos de estos liberales descartan la sanidad
divina, apoyados en una posición filosófica que
han abrazado. 2º - La negación de lo
demoniaco. 3º - La creencia en la cesación de los
carismas. 4º - El determinismo divino. Creer que
Dios escoge a algunas personas para santificarlas
a través de la enfermedad y que nada se puede
hacer entonces.
21Preguntas frecuentes sobre la sanidad divina
22 - Por qué se sanan unos, y otros no? - Si la
sanidad está incluida en la expiación, por qué
no podemos estar seguros de nuestra sanidad, como
lo estamos de nuestra salvación? - Por qué
eran sanados todos los creyentes en el Nuevo
testamento, pero no lo son todos los creyentes
hoy en día? - No se debiera considerar la
sanidad divina más como la excepción, que como la
regla?
23Por qué se sanan unos, y otros no?
- Algunos están enfermos debido a los efectos
del pecado. 1ª Corintios 11.27-30. - Dios esté
tratando de enseñarnos algo, como hizo con Pablo
(2ª Corintios 12.7), o con Job. - Otra
cuestión, es el momento adecuado. - La falta de
fe también puede ser un impedimento para recibir
la sanidad.
24Si la sanidad está incluida en la expiación, por
qué no podemos estar seguros de nuestra sanidad,
como lo estamos de nuestra salvación? Hay
quienes piensan que la sanidad no ocupa el mismo
lugar que la salvación en la expiación. Pero
leyendo las escrituras entendemos que es obvio
que la voluntad de Dios es sanarnos.
25Por qué eran sanados todos los creyentes en el
Nuevo testamento, pero no lo son todos los
creyentes hoy en día? Algunos pasajes bíblicos
sugieren que no todos eran sanados - Pablo -
Epafrodito. Filipenses 2.25-27 - Timoteo. 1ª
Timoteo 5.23
26No se debiera considerar la sanidad divina más
como la excepción, que como la
regla? Necesitamos estar profundamente
conscientes, tanto del interés de Dios en sus
hijos, como su deseo de formar parte de nuestra
vida de una manera sobrenatural. Hablar de la
sanidad de Dios como algo excepcional e
inesperado es contrario al espíritu de las
escrituras, donde encontramos un Padre amoroso
que desea el bien para sus hijos.
27El Maestro nos ha llamado a predicar el evangelio
completo a la persona completa hasta que él
vuelva de nuevo. Esto comprende la sanidad
sobrenatural del cuerpo, tanto como la del
alma. Pero cuando venga lo perfecto, entonces
lo que es en parte se acabará. 1ª Corintios
13.10