Title: Sin t
1El Cobarde Grande
2Una noche, durante una tormenta, una mamá estaba
acostando a su hijita. Estaba a punto de apagar
la luz cuando la niña le preguntó con voz
temblorosa Mami, te puedes quedar conmigo toda
la noche? La madre le dio un abrazo cálido y
tranquilizador y le dijo tiernamente No puedo,
cariño. Tengo que ir a dormir al cuarto de papá.
Después de una breve pausa, la niña contestó
El cobarde grande!
3Miremos por un momento más allá del humor de esa
historia y pensemos en la reacción de la niña. Su
temerosa súplica era comprensible. Sin embargo,
su mamá quería que ella aprendiera a confiar en
ella incluso cuando no estaba a su lado. Ella la
amaba, pero su hija no la entendió, porque no
podía ver más allá de sus propios temores. Esa
es la manera como respondemos muchas veces a
Dios. Pedimos algo específico, pero Él parece
decir No, no lo voy a hacer. En vez de
aceptarlo por fe, interpretamos mal su intención
que vamos a aprender a vivir en medio de períodos
de oscuridad, confiando en su Palabra y no en
alguna señal especial. Igual que el apóstol
Pablo, debemos darnos cuenta de que estamos
seguros en la promesa de su provisión, sin exigir
nada más. A medida que crezcamos en nuestra
relación con Jesucristo aprenderemos que la mejor
respuesta a algunas de nuestras oraciones es su
generoso No.
CUANDO DIOS DICE QUE NO A NUESTRA PETICIÓN
PODEMOS ESTAR SEGUROS DE QUE ESO ES LO MEJOR.