Title: Diapositiva 1
1DOMINGO 4º de CUARESMA - Ciclo B
Tanto amó Dios al mundo, que entregó a su Hijo
único, para que no perezca ninguno de los que
creen en él, sino que tengan vida eterna.
Jn. 3, 14-16
2La oscuridad es el reino de los que tratan de
ocultarse de la justicia. Ladrones, asesinos,
adictos al alcohol han convertido la noche en
su tiempo favorito.
3Para evitar los delitos basta con frecuencia con
iluminar los lugares más peligrosos. Por eso las
farolas son las primeras víctimas de los
malhechores.
4El profeta Isaías pronuncia un ay contra los
que ejecutan sus obras en las tinieblas y se
ufanan de su impunidad diciendo Quién nos
ve, quién nos conoce?.
5Estas observaciones se ven confirmadas por una
frase que el evangelio de hoy coloca en boca de
Jesús Todo el que obra perversamente detesta
la luz
6En el prólogo del evangelio de Juan se decía que
la Palabra era la luz verdadera. Venía al mundo
a iluminar los caminos de la humanidad. Pero,
vino a su casa y los suyos no la recibieron.
7En el diálogo con Nicodemo, Jesús contrapone dos
grupos de personas Quien no se acerca a la luz
para no ser acusado por sus obras y el que
realiza la verdad se acerca a la luz para que se
vea que sus obras están hechas según Dios.
8Jesús es la luz del mundo. Acercarse a él o
alejarse de él es el indicio más claro de la
rectitud humana. Quien le vuelve la espalda, se
resigna a vivir en las tinieblas.
9El evangelio de hoy gira en torno a esta
frase Tanto amó Dios al mundo, que entregó a su
Hijo único, para que no perezca ninguno de los
que creen en él, sino que tengan vida eterna.
10Buen momento es este tiempo cuaresmal para
meditar en los tres protagonistas de este
anuncio Dios, su hijo y el mundo.
11DIOS
Nunca se había dicho que los dioses paganos
amaran a los seres humanos. Ahora se anuncia que
el Dios de Jesucristo se caracteriza por su amor
al mundo que Él ha creado.
12SU HIJO
Jesús es el mayor de los profetas. Es el Maestro
y el Señor. Pero es, sobre todo, el Hijo de Dios
y el reflejo de su misma bondad.
13EL MUNDO
Los seres humanos han sido destinados no al
juicio condenatorio, sino a la salvación. Creer
en el Hijo y aceptar su luz he ahí el camino de
la salvación. El Hijo fue enviado para que el
mundo se salve por Él.
14Señor Jesús, Hijo del Padre y Luz del mundo, tú
nos has liberado de las tinieblas. Que nuestra
fe nos lleve a encontrar en ti la vida y la
salvación. Amén.
15Autor José Román Flecha Texto PALABRA DEL
SEÑOR Edit. Secretariado Trinitario. Salamanca
2007