Title: Diapositiva 1
1 PAULO COELHO EL DEMONIO Y LA SEÑORITA PRYM
OH Maria, sin pecado concebida,Rogad por
nosotros, que a Vos recurrimos. AmenCierto
personaje le preguntó Buen Maestro, Qué debo
hacer para heredar la vida eterna? Y Jesús le
respondió Por qué me llamas bueno? Únicamente
dios es bueno. (Lucas, 18,18-19 Nota del
Autor)
2La primera historia sobre la división nace en la
antigua Persia El Dios del tiempo, después de
haber creado el tiempo, después de haber creado
el universo, se da cuenta de la armonía que tiene
a su alrededor, pero siente que le falta algo muy
importante Una compañía con la cual disfrutar de
toda aquella belleza. Durante mil años, reza para
conseguir un hijo. La historia no cuenta quién se
lo pide, ya que él es todo poderoso, señor único
y supremo a pesar de todo, reza y, al final, la
deidad queda encinta. Cuando comprende que ha
conseguido lo que quería, el Dios del tiempo se
arrepiente, consciente de que el equilibrio de
las cosas es muy frágil. Pero ya es demasiado
tarde el hijo ya está en camino. Lo único que
consigue con su llanto es que la criatura que
lleva en su vientre se divida en dos. Cuenta la
leyenda que de la oración del Dios del tiempo
nace el Bien (Ormuz), y de su arrepentimiento
nace el Mal (Ahriman) dos hermanos
gemelos. Preocupado, hace lo posible para que
Ormuz salga primero de su vientre, controlando a
su hermano, Ahriman, y evitando que cause
problemas en el universo. Pero el Mal,
inteligente y espabilado da un empujón a Ormuz en
el momento del parto y es el primero en ver la
luz de la estrellas. El Dios del tiempo,
desolado, decide crear aliados para Ormuz y
entonces crea la raza humana, que luchará con él
para dominar a Ahriman y evitar que se apodere
del mundo.
3LA CONSERVACION DE LOS RECUERDOS Los famas para
conservar sus recuerdos proceden a embalsamarlos
en la siguiente forma Luego de fijado el
recuerdo con pelos y señales, lo envuelven de
pies a cabeza en una sábana negra y lo colocan
parado contra la pared de la sala, con un
cartelito que dice "Excursión a Quilmes", o
"Frank Sinatra". Los cronopios, en cambio, esos
seres desordenados y tibios, dejan los recuerdos
sueltos por la casa, entre alegres gritos, y
ellos andan por el medio y cuando pasa corriendo
uno, lo acarician con suavidad y le dicen "No
vayas a lastimarte", y también "Cuidado con los
escalones." Es por eso que las casas de los famas
son ordenadas y silenciosas, mientras en las de
los cronopios hay una gran bulla y puertas que
golpean. Los vecinos se quejan siempre de los
cronopios, y los famas mueven la cabeza
comprensivamente y van a ver si las etiquetas
están todas en su sitio.
4EL ALMUERZO No sin trabajo un cronopio llegó a
establecer un termómetro de vidas. Algo entre
termómetro y topómetro, entre fichero y
curriculum vitae. Por ejemplo, el cronopio en su
casa recibía a un fama, una esperanza y un
profesor de lenguas. Aplicando sus
descubrimientos estableció que el fama era
infra-vida, la esperanza para-vida, y el profesor
de lenguas inter-vida. En cuanto al cronopio
mismo, se consideraba ligeramente super-vida,
pero m s por poesía que por verdad. A la hora del
almuerzo este cronopio gozaba en oír hablar a sus
contertulios, porque todos creían estar
refiriéndose a las mismas cosas y no era así. La
inter-vida manejaba abstracciones tales como
espíritu y conciencia que la para-vida escuchaba
como quien oye llover, tarea delicada. Por
supuesto la infra-vida pedía a cada instante el
queso rallado, y la super-vida trinchaba el pollo
en cuarenta y dos movimientos, método
Stanley-Fitzsmmons. A los postres las vidas se
saludaban y se iban a sus ocupaciones, y en la
mesa quedaban solamente pedacitos sueltos de la
muerte.
5La Hermosa Vampirizada(1849) Alexandre
Dumas Yo soy polaca, nacida en Sandomir,vale
decir en un país donde las leyendas se tornan
artículos de fe, donde creemos en las tradiciones
de familia como y acaso más que en el
Evangelio. No hay castillo entre nosotros que no
tenga su espectro, ni una cabaña que no tenga su
genio familiar. En la casa del rico como en la
del pobre, en el castillo como en la cabaña, se
reconoce el principio amigo y el principio
enemigo. A veces estos dos principios entran en
lucha y se combaten. Entonces se escuchan ruidos
tan misteriosos en los corredores, rugidos tan
horrendos en las antiguas torres, sacudidas tan
formidables en las murallas, que los habitantes
huyen de la cabaña como del castillo, y aldeanos
y nobles corren a la iglesia en procura de la
cruz bendita o de las santas reliquias, únicos
resguardos contra los demonios que nos
atormentan. Pero otros dos principios más
terribles aún, más furiosos e implacables, se
encuentren allí enfrentados la tiranía y la
libertad.
6Palabras Mario Benedetti En cada libro que
leo siempre encuentro una palabra que sobrevive
al olvido y me acompaña son palabras que a
menudo me defienden de la pálida unas parecen de
cuarzo otras de lata yo las prefiero milongas y
hasta un poquito canallas pues si se vuelven
decentes quién las aguanta
7Viceversa Tengo miedo de verte necesidad de
verte esperanza de verte desazones de verte
tengo ganas de hallarte preocupación de
hallarte certidumbre de hallarte pobres dudas
de hallarte tengo urgencia de oírte alegría de
oírte buena suerte de oírte y temores de oirte
o sea resumiendo estoy jodido y radiante
quizá más lo primero que lo segundo y también
viceversa.
8Defensa de la alegría Defender la alegría como
una trinchera defenderla del caos y de las
pesadillas de la ajada miseria y de los
miserables de las ausencias breves y las
definitivas defender la alegría como un atributo
defenderla del pasmo y de las anestesias de los
pocos neutrales y los muchos neutrones de los
graves diagnósticos y de las escopetas defender
la alegría como un estandarte defenderla del
rayo y la melancolía de los males endémicos y de
los académicos del rufián caballero y del
oportunista defender la alegría como una
certidumbre defenderla a pesar de dios y de la
muerte de los parcos suicidas y de los homicidas
y del dolor de estar absurdamente alegres
defender la alegría como algo inevitable
defenderla del mar y de las lágrimas tibias de
las buenas costumbres y de los apellidos del
azar y también también de la alegría